Después del año, el niño se ha integrado por completo a la dieta familiar y tiene requerimentos nutricionales específicos que una fórmula de continuación puede ayudar a cubrir. Las fórmulas de continuación están diseñadas para niños de 1 a 3 años de edad.
Es importante que antes de empezar a darle cualquier tipo de fórmula primero consultes con su pediatra ya que él te recomendará la opción que mejor se ajuste a sus necesidades, normalmente las que más recomiendan son fórmulas fortificadas con hierro o aquellas que están diseñadas para alguna necesidad especial de nutrición, por ejemplo, bajas en lactosa o parcialmente hidrolizadas.
Debes saber que las fórmulas de continuación tienen una composición diferente a la leche entera, pues las fórmulas contienen un perfil de nutrientes específicos para cubrir los requerimientos de niños de 1 a 3 años. Existen diversos tipos de fórmulas, algunas de ellas pueden incluir ingredientes importantes para el desarollo de los niños como DHA, hierro, vitamina D o HMO*, éstos nutrientes pueden no encontrarse en cantidades suficientes en su dieta, por tanto, el elegir un producto que los contiene puede ser una buena opción.
Sigue siempre las instrucciones que se indican en la etiqueta del producto y evita mezclar con más agua de lo indicado, pues al hacerlo "diluyes" el aporte de nutrientes que se indican en la información nutricional. No le suministres la mezcla caliente y recuerda siempre lavar tus manos antes de prepararla. Además, es clave que la higiene al preparar cualquier alimento es muy importante, cada utensilio debe lavarse cuidadosamente evitando que no quede ningún residuo de jabón y procura siempre usar agua potable o purificada al momento de reconsituirla sí se trata de un producto en polvo.
Te recomendamos consultar a un médico o profesional de la salud, él es la persona adecuada que puede brindarte mayor información con base en las necesidades y requerimientos específicos para tu pequeño. Recuerda que la leche materna es lo mejor para el lactante y se recomienda por el mayor tiempo posible durante la infancia.